KRISHNAMURTI,
EL AVATAR REBELDE
Por:
Cristina Teruel
Extraño destino el de este
hombre, sin embargo a poco que se lo estudie, se puede concluir que los hechos
de su vida sucedieron tal como debían suceder. Y que el mismo hizo lo correcto
en todo momento, en suma toda su vida en si misma es un claro ejemplo de lo que
difundió como filosofía.
La cual prácticamente poca
gente ha seguido bajo la excusa de no comprenderlo, y los que dicen haberlo
comprendido se excusan diciendo que seguir dicha filosofía de vida es sumamente
difícil. Pero si se ha tenido oportunidad de leerlo, y se releen algunas
interesantes frases de Jesucristo, se vera que en cierto sentido Krishnamurti
vino a subrayar el hoy tan en boga “desapego”.
Desapego del cual ya había
hablado Jesús, cuando decía que para seguirlo a Él, había que dejar todo,
dinero, posesiones, familia...¡si a eso no se le llama desapego! Han pasado mas
de 2000 años y sigue siendo difícil desprenderse de todo para lograr la verdadera
LIBERTAD. En el caso de Krishnamurti además enseño que tampoco debían
posesionarse de el mismo, porque eso también seria un factor restrictivo de la
libertad de sus oyentes.
Es mas jamás quiso tener
seguidores, cuando observaba a alguien que iba a mas de una conferencia, lo
hacia notar como una forma de apego a su persona por parte de esa persona. Para
entender mejor a Krishnamurti basta con ver la coherencia con la cual vivió tal
cual como diserto en sus numerosas conferencias alrededor del mundo.
Muchas veces decía que “cuando se sigue a
alguien (un líder) dejamos de buscar la verdad y nadie posee la llave de la
Verdad”. Cuando decimos que actuó de la misma forma que hablo debemos entender
que cuando contaba con apenas 14 años, conoció a Mister Leadbeater, un miembro
de la Sociedad Teosófica (Inglaterra) quien en 1909 llega a la India,
convencido que un Guía Espiritual iba a reencarnarse pronto, este guía es
conocido por la cultura oriental con el nombre espiritual de “Maitreya”.
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| CHARLES LEADBEATER |
Leadbeater llega a la India convencido que en
este país se produciría dicha reencarnación del mencionado Guía. Y lo
identifica en la persona del entonces adolescente Jiddu Krishnamurti. Y a
juzgar por lo que sucedió años mas tarde, Leadbeater no se equivoco, claro que
las cosas no salieron como lo soñó la Sociedad Teosófica con la famosa Madame
Blavatzky a la cabeza...porque la “reencarnación de Maitreya”....¡se les rebelo
y se fue pegando un portazo!
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| Madame Blavatzky |
Pero esta rebelión tuvo una coherencia total con
el mensaje que daba, ya que se centraba en la libertad personal del ser humano,
por lo tanto mal podía Krishnamurti aceptar tener que adaptarse a una
estructura que le decía lo que tenia que hacer, a donde ir.
En una palabra sucedió lo que
sucede hoy en día con quienes “descubren una estrella”, se quisieron convertir
en “mannagers del nuevo avatar importado directamente de la India”. Pero el
esmirriado Hindú de mirada melancólica y lejana...de dócil no tenia nada y como
dicen hoy en día los jóvenes “se quiso cortar solo” y dejo a la Sociedad
Teosofía desconcertada...y sin Guru. Planteadas las cosas así, veamos porque
fue como fue Krishnamurti a través de su Estudio Numerológico.
Tanto su Nro. 11 de
total de nombre, como el de su día de Natalicio, lo muerta como un filosofo
revolucionario y opuesto a cualquier tipo de estructura que no le permita al
ser humano se libre. Y por supuesto su idea se baso en enfrentar a la sociedad
mediante “ideas de ruptura”. Además la mezcla de numero 11 y 7 (total y
vocales respectivamente) lo hizo una persona poco cálida y distante. En muchos
casos incluso puede que le haya molestado verse demasiado acosado por la gente
sobre todo cuando advertía actitudes de idolatría.
En mas de una ocasión debe
haber tenido que tomar distancia, para disfrutar de la soledad y tomar contacto
con la naturaleza. El nro. 7 lo hacia sumamente espiritual, pero con un
tipo de espiritualidad muy interna, de aquel tipo de espiritualidad que no
necesita concurrir a saltuario alguno, porque sentía que Dios estaba dentro de
el mismo. Hay un punto muy interesante en su estudio
Numerológico y es que
Krishnamurti no quiso ni busco caerle en gracia a la gente que lo escuchaba,
justamente porque ni siquiera quería que lo siguieran como discípulos, jamás
Krishnamurti escribió libro alguno. Todo lo que ha llegado a las editoriales
son transcripciones de sus charlas tomadas por otras personas. Todo esto lo
destaca como un digno maestro de la Era Acuariana.
En la cual se debe buscar a
nuestro propio “guía Interno”. Será difícil para la Humanidad entender que la
era Acuariana será una era en la cual no habrá Pastor, sino que deberemos
aprender a unirnos unos con otros...porque ya vino hace 2000 años quien indico
que debíamos amarnos los unos a los otros, y también fue ÉL quien dijo que
después de
El no debíamos seguir a nadie,
porque vendrían muchos falsos profetas. Fue un Maestro a pesar de si mismo, tal
lo indican su numero 11 y el 22 de sus vocales de apellido, este ultimo incluso
le otorgo trascendencia Internacional. Krishnamurti vino a enfatizar que ahora
era el tiempo de lograrlo. Jiddu cumplió con su mision, que consistió
literalmente “dejarnos sin red”. No permitió que lo convirtieran en Líder, vino
a enseñar una comunicación absolutamente “personalizado con Dios”...sin
intermediarios.
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